El feminismo y la prostitución pueden ser compatibles perfectamente, el feminismo parte de querer la igualdad de derechos entre el hombre y la mujer ya que el feminismo no es lo contrario de machismo.
Yo soy una prostituta y feminista, me entristece escuchar que si me prostituyo soy víctima del machismo. Yo no soy víctima del machismo ni de ningún tipo de esclavitud no soy víctima de la trata. Yo soy víctima de la manipulación.
Fui yo la que escogí la prostitución libremente, nadie me obligó y fue porque me gusta el sexo, tener sexo con desconocidos era, es y será algo natural en mí. La prostitución es un trabajo que se adhiere a mi carácter y a mi modo de vivir la vida como lo ha sido el quiromasaje, por lo tanto puedo decir que trabajo en lo que más me gusta, mis trabajos son mis hobbies y además feliz y orgullosa cobro por ello.
Añado que jamás he sentido verguenza por lo que he hecho, no me averguenzo de mi carácter ni de mi sexualidad que vivo y disfruto libremente y como más quiero, pero si que he sentido el estigma, he sentido la presión de la invisibilidad, desprecio, hipocresía, compasión...
¿Todo un sinsentido verdad?
En un país como España cuando se descubre una esclava víctima de trata y obligada a prostituirse, la gente siente simpatía y apoyo hacia la víctima pero una prostituta de verdad que decide ejercer por su propia voluntad e independencia sufre el vacío y el repudio y aún por si fuera poco se nos culpa de frivolizar a las víctimas de la esclavitud sexual.
¿Acaso no se puede entender que la trata de personas, la esclavitud sexual no se puede comparar con la prostitución? La trata de personas es el comercio de humanos con propósitos de esclavitud, esto es ilegal, va en contra de les derechos humanos y lo que habría que perseguir, en cambio la prostitución debería regularse. Regularse porqué es un trabajo cosentido por mujeres, hombres y también transexuales y travestis. La prostitución no solo tiene cara de mujer.