Han pasado muchas cosas desde la última entrada y creo que es bueno compartir contigo una de las que más impacto han tenido sobre mí, como ha sido conocer a Nico Bertrand. Nico es realizador, fotógrafo en Barcelona, también es artista de cine pornográfico, videos musicales y cortometrajes.
Me explicó que además de films y fotos para adultos, está comprometido con la divulgación de la sexualidad opinando que es un tema que debe ser abordado de muchos y diversos puntos, así, por todo ello me propuso una entrevista en video y hablar sobre sexualidad desde el punto de mira de una prostituta.
Entré en https://www.studiodarkness.com/
Ví las diferentes entrevistas que había realizado y pensé que quería formar parte de ello.
Aprovecho para aclarar que las preguntas no estaban pactadas, Nico me dijo que si quería me las pasaba pero que no era su forma de trabajar. Me dejé llevar y visto el resultado de la entrevista es cierto que me he dejado algunas cosas, he repetido otras... Pero en esencia el resultado es el que es: Una trabajadora sexual como tantas otras que no estamos acostumbradas a que se nos dé voz, a que seamos representativas de nada, pero claramente hay algo de lo que estoy segura: El trabajo sexual es un trabajo que ofrece un servicio a personas tanto si es por pasar un rato lúdico o saciar una posible necesidad.
1. ¿Autodenominarse Escort es un eufemismo para no decir puta?
Yo creo que sí, el problema creo que viene porque no todas las trabajadoras quieren apropiarse de esta palabra. La palabra puta lleva un estigma muy grande y escort aunque quizás con "menor" medida también, sobretodo en la mujer. Declararse puta es aceptar que lo eres, muchas no se sienten putas aunque se dediquen a ello. ¿Por qué? Pues porque se nos ha enseñado a repudiar esta palabra a justificarnos y victimizarnos así nuestra dignidad queda a salvo. No está bien visto que una mujer quiera ser puta porque se adapta a su personalidad, en cambio, si dice que lo ha hecho por necesidad extrema, hipócrita y lastimosamente será mejor aceptada y recibirá el perdón o la compasión y condescendencia de su entorno. De otro modo se la negará y repudiará.
Estamos ante un mundo que discrimina las clases sociales, es mejor ser rico que ser pobre, es mejor ser escort que ser puta...
Este es un tema muy amplio ya que trabajar de escort no implica siempre elitismo, sinó ofrecer un servicio de compañía a personas de cualquier estatus social. Lo que está de moda es ser escort incluyendo servicios sexuales, por lo tanto ejerces de escort y de prostituta, sí definitivamente creo que es un eufemismo a no ser que te dediques exclusivamente a ofrecer un servicio de compañía.
Yo ante todo soy una escort particular que ofrece servicios de puta.
2. ¿Cuántas mujeres contratan tus servicios? Entiendo esta pregunta como la mujer que me llama para concertar un servicio. Pocas.
El perfil ha sido variado como pasa con los hombres.
Las mujeres temen a la prostitución porque así nos lo han enseñado, lo que si que he visto es interés y estupefacción entorno a mi trabajo (así lo he podido ver con diversas mujeres que me han contactado) pero la mayoría no se ha decidido. Acostumbran a abrir conversación desde la desconfianza y el temor, ¡casi me piden perdón! Y eso me indigna y me apena muchísimo. No me gusta que las mujeres vivan con miedo y piensen que la prostitución es dominación y exclusividad masculina. Estas mujeres sin darse cuenta caen en ese machismo absurdo que parte de la idea que el cuerpo de una mujer prostituta es dominio del hombre, no se atreven a vivir su sexualidad y probar un servicio que se destina tanto a la mujer como para el hombre pero la mujer no da el paso porque le tienen vetado ese uso a fuerza del miedo y la desinformación.
Lo que sí es más normal por otro lado es que vengan acompañadas por sus parejas masculinas.
3. Seguro que muchos hombres que recurren a ti tampoco "necesitan" tus servicios y lo hacen por puro morbo. ¿Dónde queda el morbo en el caso de la mujer? ¡Claro! ¡Y eso es genial!
Prefiero que me contraten desde el morbo y las ganas de pasar un rato lúdico que desde el miedo, la necesidad o el trauma. Contratar un servicio sexual puede o no puede ser una necesidad, eso debe valorarlo cada persona de manera íntima y personal. Por lo que sé, he conocido y visto la mujer tiene morbo pero se censura, las mujeres están "castigadas" a tener miedo de las putas, somos todo lo que una mujer no debe ser. Históricamente nos han temido: Nos hemos acostado con sus maridos, nos ven como portadoras de enfermedades.
Los tiempos han cambiado, la sanidad en nuestro país es un privilegio y es más fácil cuidarse e informarse.
Hay mujeres que se responsabilizan de lo que hacen las mujeres putas. El lema es: "Si una se prostituye nos prostituimos todas". Entonces jamás son clientas, son mujeres asustadas que se convencen de que somos mujeres víctimas sin capacidad de agencia ni decisión.
4. ¿Crees que la mujer tiene la líbido más baja? ¡No! No la tiene más baja, es diferente. El hombre a lo largo del día por ejemplo piensa nuchísimas veces en sexo más que nosotras y nosotras lo tenemos más fácil para ligar así que nuestra sexualidad está más cubierta que la de ellos,supongo que no tenemos tanta ansiedad. 5. ¿Has consumido sexo de pago alguna vez? A día de hoy no, pero me llama la atención,es algo que no descarto. De echo más de una vez he imaginado que tengo encuentros con compañeras. Sobretodo me pienso en encuentros con mujeres transexuales.
6. ¿Se puede ser trabajadora sexual sólo por dinero, sin que te guste? A parte de lo que yo opine o recomiende, sí es posible trabajar en esto solo por dinero. De hecho he conocido unas cuantas mujeres que han ejercido sin que les gustara.
Depende como te gestiones. En este trabajo mientras tengas claro que vas a tener relaciones sexuales con desconocidos y no te suponga un trauma o un dilema moral puedes hacerlo. Parece fácil, pero para muchas mujeres cobrar por sexo sigue siendo indigno. La mujer no tiene precio, ¡claro que no! El precio se lo ponemos a nuestro tiempo y a nuestros servicios.
Aún tenemos muy asumido que la sexualidad hay que darla por "amor" o gratis, lo mismo ocurre en el hogar, la mujer debe hacerse cargo de la casa y los hijos gratis y por amor se da por sobreentendido que la mujer nace para ello aún hay quien cree que lo llevamos en los genes. 7. En términos prácticos, si una mujer decide ser escort, ¿qué debe hacer?, ¿por dónde empieza? Lo más importante es que tenga acceso a la información: Que sepa dónde y a quién acudir.
Eso quiere decir que haya información visible y abierta y falta muchísimo de ambas cosas. Las redes sociales a mí me han servido para normalizar un poco mi actividad, a que la gente me conozca y me juzgue un poco menos de víctima pero poner en mi perfil que soy prostituta puede costar la censura a mi persona. Soy un mal ejemplo.
Entonces, una mujer que empieza le costará llegar a mí o a otras trabajadoras independientes como yo y muy probablemente termine trabajando para terceros. Esta persona solo podrá espabilarse estudiando anuncios y aprendiendo como anunciarse pero le costará encontrar a alguien de confianza y sus referentes serán personas que se lucrarán de su trabajo y esfuerzo.
8. ¿Cómo gestionas tu propio placer en tu trabajo?
El trabajo sexual hace que trabajes con tu cuerpo y sexualidad, te pone en contacto con tu placer. A mí me ha servido para redescubrirme a mí misma y mi sexualidad, conozco mi cuerpo más que nunca, he descubierto irónicamente que en el sexo no es todo penetración que una relación sexual satisfactoria no depende de un pene.
He aprendido a encajar bien lo que siento con un pene dentro de mi cuerpo y he aprendido que no lo necesito para nada, sinó que es un complemento al juego sexual.
9. ¿Y el placer en tu vida privada, lo gestionas de igual manera?
El placer en mi vida privada es muy parecido al de mi vida laboral, y mucho más ahora que conozco mi cuerpo y mi sexualidad. Es posible que la diferencia sea en que no pacto lo que vamos a hacer en la cama pero a veces he tenido que guiar a mi compañía sexual o ella a mí para comunicarnos que nos gusta o no.
10. ¿Tu trabajo te ha permitido descubrir una sexualidad que desconocías? ¡Totalmente! Bueno... De a veces no sé hasta que punto soy yo o es el trabajo, supongo que ambas cosas pero soy una persona que me entregado mucho en todos los trabajos que he tenido y he aprendido a disfrutarlos y a sacar experiencias positivas de cada uno de ellos.
En el sexo ha sido más fácil ya que a mí me gusta mucho la sensualidad, la sexualidad, el morbo, la provocación... Pero todo y tener una experiencia sexual me faltaban muchas cosas y mucha información que he ido aprendiendo y descubriendo en este trabajo.
11. ¿Con la experiencia, cuando gestionas una cita, ¿intuyes si esa persona te hará disfrutar sexualmente?
No intuyo si me hará disfrutar sexualmente pero si puedo hacerme una idea de si nos vamos a entender a nivel personal.
12. Tú ahora mismo estás dando la cara y reconociendo abiertamente tu profesión. ¿Crees que es una tendencia al alza o todavía hay mucho miedo a decir: "soy puta"?
Creo que hay un punto fuerte (y muy comprensible) de rebeldía, yo me he cansado de ver como infantilizan a la mujer como se intenta hacer sentir mal a la prostituta reconciliándola con el sentimiento ancestral que hemos cargado las mujeres siglos y siglos. He visto mujeres que empezaron sintiéndose mal porque repetían los estereotipos patriarcales, la mujer debe entregarse gratis al sexo, ganar mucho dinero no está bien... Todo culpas y autocastigo.
Con el tiempo las he visto cambiar de opinión: "Qué carajo" me decían algunas "Me mantengo en forma, me desean, mando yo y gano un sueldo más que decente con este trabajo"
Las mujeres se empoderan porque ya son fuertes de por sí pero el pensamiento ancestral de que esto es un trabajo indigno las desvaloriza, las avergüenza y las estigmatizan eternamente, así que por esa presión social hay mucho miedo a decir soy puta.
13. ¿Crees que la prostitución puede llegar a empoderar a la mujer? En el video respondo que totalmente pero creo que las mujeres nos empoderamos solas, nosotras empoderamos nuestras actividades. Una mujer puede estar muy empoderada y trabajar en el sector doméstico, una mujer puede estar muy empoderada y trabajar como prostituta, el trabajo no es quien nos hace más fuertes o débiles. Somos las personas. Creo que la prostitución con toda la carga social que conlleva saberla llevar con naturalidad, orgullo, fuerza y dignidad ya es todo un ejercicio de empoderamiento.
A mí me ha ayudado a empoderarme porque me he quitado muchos complejos de encima, acepto mejor mi cuerpo, heaprendido un montón acerca de mi sexualidad...
14. La prostitución es uno de los negocios más rentables, aunque pocas personas reconocen consumirla. ¿Por qué crees que es así? Un importante porcentaje de los consumidores son hombres casados y si reconocen consumirla están reconociendo a todas luces una infidelidad. El chiste se cuenta solo. Independientemente de si es un cliente casado o no insultar a los clientes, tratarlos de criminales y maltratadores tampoco ayuda, es echar piedras en el propio tejado. Consumir prostitución en España no es un delito pero algunas instituciones quieren obligar a los hombres que no consuman prostitución ejerciendo violencia psicológica y multas.
15. ¿Cómo concilias tu trabajo con tu vida familiar, social y sentimental? ¡Con horas concertadas! Este trabajo te da mucho tiempo y libertad de horarios. Es cuestión de organizarse.
16. ¿Consumes pornografía?
Sí
17. ¿Y qué categoría de porno te gusta más?
El porno amateur